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LA HISTORIA DE COLONIA LIEBIG Y SU COOPERATIVA AGRÍCOLA  43



              también tenían intereses propios en el asunto, como el ya mencionado Francisco
              Mühlenkamp, organizador de la comisión de ayuda, quien manifestó que con
              los colonos alemanes estaba llevando adelante un "experimento", porque él
              mismo tenía planes para un proyecto de colonización, pero deseaba ver primero
              los resultados en la Colonia Liebig.  Además, el gobierno y la empresa de ferro-
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              carriles también estaban interesados, por razones obvias, en el desarrollo de la
              zona y es por ello que se mostraron tan generosos con los colonos.
                 Por último, es importante destacar el rol que tuvo el pensamiento coopera-
              tivista en la supervivencia y posterior desarrollo de la colonia. A lo largo de sus
              91 años de historia, la Cooperativa Agrícola de Colonia Liebig ha ido demos-
              trando con ejemplos contundentes que el cooperativismo como forma de orga-
              nización económica no solo puede ser exitoso, sino también necesario y
              deseable cuando lo que se pretende es sostener un vínculo que promueva tanto
              el desarrollo económico personal de los individuos, como también los lazos
              humanos de solidaridad y ayuda mutua, que son la base de cualquier tipo de
              proyecto social que aspire al éxito.
                 Al fundar la cooperativa en diciembre de 1926, los colonos comprendieron
              que la ayuda mutua era indispensable para la supervivencia. Esta idea no era
              novedosa en ese entonces y el hecho de que en esos años se hayan fundado
              tantas cooperativas en nuestro país habla de que la mayoría de los inmigrantes
              que llegaban a estas tierras ya traían consigo las ideas de cooperación y soli-
              daridad. Pero lo que hay que destacar de la actitud de estos colonos y sus
              descendientes es la persistencia y la confianza que mantuvieron a lo largo de
              los años, incluso cuando formar parte de la cooperativa no parecía tener un
              rédito económico significativo. Permanecer, aun cuando salir era la solución
              económica más rentable, fue la prueba que tuvieron que superar los socios que
              aún forman parte de la cooperativa. Entre los socios actuales se cuentan varios
              descendientes de los colonos alemanes llegados en 1924, aunque también hay
              que reconocer que la apertura con que los socios fundadores recibieron a los
              nuevos socios de diversos orígenes durante el tiempo en que la cooperativa
              todavía no era limitada, fue determinante para la supervivencia de la cooperativa
              como tal.
                 Con respecto a los aportes de la Cooperativa Liebig al desarrollo económico
              y social de la región, los ejemplos que se mencionaron en este artículo son
              solamente algunos de los muchos que se podrían detallar, pero sirven para
              confirmar la tesis de que sin los reiterados esfuerzos de la cooperativa, la Colo-
              nia Liebig probablemente no hubiera sobrevivido como tal.
                 Recorriendo la historia también se puede comprobar que la Cooperativa
              Agrícola de Colonia Liebig ha jugado un importantísimo rol en el desarrollo de
              la actividad cooperativista en toda la región. Fue la primera cooperativa de la
              provincia de Corrientes, y desde su fundación hasta la actualidad nunca dejó de
              participar activamente en cuanta actividad referida al cooperativismo se realizara
              en la zona, siendo muchas veces la organizadora de tales actividades. Un ejem-

              34   Esto es lo que se lee en un escrito elaborado en octubre de 1927 por el consejero guber-
              namental alemán, Hermann von Freeden, quien visitó Colonia Liebig en noviembre de 1926.
              PAAA, Embajada de Alemania. Buenos Aires, box 68.
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