Page 49 -
P. 49
Comienzos del periodismo en idioma
alemán en la Argentina
REGULA ROHLAND DE LANGBEHN
Universidad de Buenos Aires
1. Ambiente general
El ambiente periodístico porteño en alemán a partir de mediados de los años
1860 es bastante variado, pero los periódicos eran efímeros y cambiaban con-
tinuamente de mano .
1
Uno de ellos comenzó en 1865 como Deutsche Zeitung, cambió de dueño
varias veces fundiéndose con otros periódicos más efímeros, estuvo unos pocos
años en poder de Carlos Mauricio Reinhardt, quien le dio el nombre de Deutsche
La Plata Zeitung y, luego de algunos cambios más, en 1880 finalmente quedó en
manos de Hermann Tjarks, cuyo hijo Emilio lo siguió editando hasta fines de la
Segunda Guerra Mundial. Lo acompañó entre 1884 y 1945 un semanario, el La
Plata Post. Por su lado, luego de comienzos difíciles, Juan Alemann fundó en
1878 el Argentinisches Wochenblatt y once años más tarde el Argentinisches
Tageblatt, que sigue apareciendo ahora como semanario, dirigido por sus bis-
nietos Roberto y Juan Alemann. Es decir que los dos emprendimientos periodís-
ticos más longevos de la colectividad alemana se establecieron casi al mismo
tiempo y con un perfil material bastante similar: ambos produjeron un diario y un
semanario, este último destinado a una lectura instructiva y reflexiva, mientras
que el diario –sin cerrarse a artículos de fondo, los cuales luego se reproducían
en los semanarios– se nutría ante todo de noticias, actualidades y avisos. El
Deutsche La Plata Zeitung (DLPZ) y el Argentinisches Tageblatt (AT) desde sus
comienzos se orientaron según políticas diferentes, encauzadas originariamente
por el lado del Wochen- y Tageblatt por la nacionalidad suiza y la tendencia
política progresista de Juan Alemann y sus hijos, frente al tradicionalismo de
Hermann Tjarks por el otro, acérrimo defensor del recién fundado Reich guiller-
mino en su Deutsche La Plata Zeitung. Este último periódico tenía mayor tirada
y una amplia aceptación en la colectividad, y en momentos de crisis supo hacerse
subvencionar por el Estado alemán. Su tendencia conservadora se expresa, entre
otros aspectos, en su apego a la enseña patria con los colores negro, rojo y
blanco. Durante el nacionalsocialismo en Alemania se adscribió a esta ideología,
lo que llevó a que su publicación fuera prohibida en la Argentina luego de la
Segunda Guerra Mundial. Después de la prohibición tuvo un retoño en el diario
Freie Presse, que se extinguió definitivamente a comienzos de los años 1970.
1 Dediqué hace poco un sucinto artículo a la historia de los periódicos en el AT, cf. Rohland
2014. Una representación cabal de su historia se encuentra en Bachmann, 1884, 83-97. La
discutiremos en el segundo apartado de este trabajo.