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LUIS FERNANDO RUEZ: EXILIO POLÍTICO, SACRIFICIO INTERRUMPIDO 27
su esposa y él mismo no gozan de buena salud. Una sombría visión de los
acontecimientos no le impide albergar cierta esperanza.
La mano de Dios pesa sobre nosotros. Pero no quiero quejarme. Que
vuelva a mostrarme su misericordia y me conceda un lugar tranquilo
sobre la tierra para los pocos años que aún me quedan por vivir.
(Ibid.: 243)
La situación empuja a Ruez hacia las colonias alemanas del Alto Paraná, en
el Territorio Nacional de Misiones. Arriba a la colonia Puerto Rico en marzo
de 1931 en circunstancias en que el pueblo sufría una epidemia de malaria.
Inmediatamente atiende a casi todos los enfermos, por lo que es recono-
cido y logra hacer pie en el lugar. Aunque el “panorama” del Alto Paraná
le resulta “magnífico” y “uno se siente como en las sierras centrales de
Alemania” (Ruez 1931c), pronto descubre un cuadro devastador de odios
y rivalidades.
Todos están en contra de todos en Puerto Rico. Germano-brasileños
contra alemanes del Reich, católicos contra protestantes, alemanes
contra la gente de color, los maestros, unos verdaderos devoradores
de alemanes, la policía explota a todos. Los comerciantes explotan a
los colonos, los colonos embaucan a los comerciantes y sobre todo el
pastor agita a un grupo contra otro. (Familienchronik ms.: 246) 24
A pesar de este clima enrarecido, Ruez se ve urgido por la necesidad de
“darles a mis chicos un hogar” (ibid.: 247) y decide instalarse definitivamen-
te en Puerto Rico. En 1946, y tras la muerte de su primera esposa, se casa
con Matilde Zimeck, con quien tiene otros cuatro hijos. Ruez transcurre
sus últimos treinta años de vida en el Alto Paraná como padre de familia,
ejerciendo como “médico de pueblo” (Gallero y Cebolla Badie 2013), de la
policía y de una empresa yerbatera.
Repasemos algunos hechos que indican el tenor de la postura antinazi
de Ruez durante el ascenso de Hitler y hasta el fin de la Segunda Guerra
Mundial. En 1938 participa en un concurso de “literatura en el exilio” patro-
cinado por la American Guild for German Cultural Freedom, una asociación
25
de intelectuales y artistas exiliados del nazismo . Por una parte, el interés
24 La colonia Puerto Rico se funda en 1919 en el marco de un proyecto de coloniza-
ción germánica más amplio (Gallero 2009). La mayoría de sus habitantes pertenecía a
familias alemanas de tradición campesina y fe católica, nacidas en Rio Grande do Sul.
Sus ancestros en Alemania provenían de la región pobre de Hunsrück, cuyo dialecto
conservaban. Por el contrario, Ruez y su familia eran parte de una minoría de “alemanes
nacidos en Alemania” que hablaban el “alemán correcto”. Los Ruez, además, contaban
con otros atributos —clase, educación, profesión, urbanidad, circunstancias migrato-
rias— que los distinguían de los “teuto-brasileños”, la “clase más vil que he conocido”
(Familienchronik ms.: 247).
25 La Liga, con sede en Nueva York, fue fundada por el príncipe Hubertus zu Loewens-
tein en 1935 y actuó hasta 1941. Su propósito era la defensa de los valores de la Kultur
alemana contra la acción propagandística nazi. Ver, por ejemplo, Aengenvoort (2006).